Fiestas en Buenos Aires

(Corresponde al 20 de dic. al 21 de enero)

Llegamos a Baires el jueves por la noche, y luego del esperado recibimiento en Ezeiza (y en la autopista con el Cabezón), nos fuimos para V. del Parque a cenar con la familia. No duró mucho el evento porque el vuelo nos cansó bastante y estábamos muertos (el que tomamos fue todo de día, y salió a la mañana de Sydney, así que para cuando teníamos ganas de dormir, a la noche para nosotros, estábamos llegando a Santiago donde tuvimos que esperar 3 horas para volver a salir hacia Buenos Aires).

El viernes la pasamos entre trámites urgentes, incluyendo la compra del regalo para la que sería mi futura ahijada, la charla prebautismal y el recital de Soda (para el que Martín se encargó de conseguir las entradas). Este último estuvo buenísimo! Aunque lo empezamos a saborear más con el paso del tiempo, supongo que por la rapidez con la que pasó todo.
Los días siguientes también fueron de locos, incluyendo el bautismo y un montón de reuniones. Es increible como cuando uno vuelve le dan ganas de ver a todos juntos enseguida!
Después llegaron las fiestas, que estuvieron lindas y las vivimos casi como si nunca nos hubiéramos ido. Durante esos días seguimos además con la ronda de visitas (contando a cada paso nuestras vivencias por la migración y nuestros planes futuros), jugando basket, cesto (Mari participó de un torneo de "veteranas" en lo que sería su único partido del 2007) y haciéndonos lugar para ir a ver el recibimiento de Froma!

Terminadas las fiestas tuvimos la primera despedida cuando mi hermano se fue de vacaciones, y después de eso nos fuimos con casi toda la familia a San Clemente. Ahí tuvimos tiempo para compartir con ellos la playa y un montón de comidas (esto último se empezó a reflejar en nuesta panza!). Al final de la estadía cayeron los Boly por un día completo en el que les mostramos todo San Clemente. Después de eso volvimos para Buenos Aires.

Estuvimos un par de días en Buenos Aires, más que nada organizando cosas para el viaje (vacunas, pastillas a comprar, etc) y nos fuimos Mendoza. Ahí estuvimos con los primos de Mari, descansando un montón y pasándola espectacular. Fuimos a Chacras de Coria, Potrerillos y al club a comer un asado impresionante hasta altas horas de la noche.

En la última semana cerramos las cosas del viaje y se nos juntaron unas cuantas despedidas, así que volvimos a estar como locos. El 21 de enero, luego de un mes buenísimo en Buenos Aires, volvíamos a estar en Ezeiza, para una despedida distinta a la anterior...

Ariel