Luxor con hassle

Luego de la relativa paz de Aswan y de un viaje en tren sin mayores sustos (mas alla de los clasicos como que todos te quieran cagar y sacarte algo de plata demas, desde el tipo de seguridad de la estacion de tren hasta otros pasajeros que terminaron viajando con nosotros), y de una extensa charla con un profesor de historia Paquistani (el tipo estaba aburrido y no paraba de hablar), llegamos a Luxor.


Luxor resulto ser una ciudad super turistica, donde de los 200000 habitantes, 199000 viven de turismo, asi que si la gente era pesada en Aswan y Cairo, en Luxor se hizo insoportable. Por suerte caimos en un hostel un poco apartado del templo de Luxor (centro de la ciudad), y se podia andar tranquilo. El hostel (Nubian Oasis hotel), atendido por un egipcio con sangre nubia (Nubia era la zona al sur de Aswan, hasta parte de Sudan, ahora ocupada en gran parte por la gran represa y el lago Nasser) casado con una Coreana (algo poco usual para la gente de esta zona), ofrecia bebidas con alcohol (los musulmanes no toman alcohol, asi que sus vicios se limitan a fumar todo el tiempo tabaco, o sentarse en un bar a fumar shisha) y hasta tenia cocina al estilo egipcio, sin ninguna medida de seguridad (para abrir el gas habia que usar un destornillador, por ejemplo). En la parte de la cocina, en la terraza, estaba tambien la zona de comedor al aire libre (en general en estas zonas no llueve, asi que muchas cosas son al aire libre). Al principio el hostel no convencio, pero despues de pasar una noche en general nos encanto (Monsur, el dueno, resulto ser un fenomeno!). Para colmo habia Argentinos y Chilenos en el mismo piso, asi que practicamos nuestro espanol.

El primer dia completo en Luxor lo pasamos recorriendo la ciudad y tratando de encontrar donde comprar los tickets para el micro a Dahab. No pudimos encontrarlo (ni siquiera nos pudieron orientar a la oficina de turismo, porque cada uno que nos decia donde era, en realidad nos mandaba a alguna agencia), pero nos cruzamos con un Air Egipt y terminamos comprando pasajes de avion por 60 USD. A la tarde, ya mas relajados, visitamos el museo de Luxor y le dimos varias vueltas al templo de Luxor (visto desde afuera, en la noche), al que decidimos no entrar para reservarnos todo para Karnak.

Volviendo a la shisha (la probamos en Dahab), es una especie de botella con un liquido aromatizado y carbones en la parte de arriba, y una manguerita que al aspirar hace hace calentar los carbones despidiendo humo con sabor al liquido (puede ser de menta o muchos otros sabores).

Mas detalles sobre nuestras 4 noches en Luxor en los siguientes posts.

Ariel